Si el bar del verano es el Cañete, la terraza que toca es la del Martinez. Con su nombre así, sin florituras: la Terraza Martínez (Carretera de Miramar, 38). Los dos lugares responden al mismo dueño, Jose Mª Parrado, un hombre con carisma.
Una tarde-noche de hace pocas semanas tenía una cita con un amigo, pero no veíamos claro dónde quedar. A él le apetecía vermut y aire libre, sencillez, y yo tenía antojo de un señor arroz. Nos acabaron de convencer las vistas. Nos habían dicho que eran increíbles. Lo son.
Jugamos un rato al futbolín. Perdí porque fui engañada: mi amigo me invitó, antes del partido, al famoso Elixir de la casa, un brebaje misterioso que los de Casa Mariol han creado a medida para la Martínez. Lo que lleva, no lo sé -la receta de la familia Vaquer es secreta-, pero sí sé que de repente mi portero no paraba ni una.
Ensaladilla rusa, mejillones, cinco tipos de arroces a escoger, un servicio nocturno de 'ángeles' (chóferes que te llevan a casa si andas un poco despistado), conciertos, barra de cocktails, habaneras... Vaya, que sí. Que la Martínez es donde hay que estar.
© Fotos: Casa Mariol, Arduino Vanucchi